martes, 30 de diciembre de 2008

ODA A LA SAGRADA FAMILIA

Jesús, en cuanto hombre,
nació de mujer en familia humana,
y ya, con ese nombre,
entra de buena gana
en la historia de humana carabana.

La familia es proyecto,
un proyecto, sí, de amor y de vida
que exige un arquitecto
que le dé su medida,
porque es templo en el que Dios anida.

No hay modelo acabado
que fige la familia y la defina;
un amor entregado
que al servicio encamina,
es quién la define, no una doctrina.

Si lo es de verdad,
la familia es lugar teológico,
sacramentalidad,
signo antropológico
del Reino de Dios escatológico.

Que es santa la familia,
y es sacramento del Dios encarnado;
en ella se concilia
y se enlaza hermanado
lo que siendo carnal se hizo sagrado.

Y es Nazaret la escuela
de la familia en amor integrada,
en ella se revela
la caridad colmada
y en servicios de amor manifestada.

viernes, 26 de diciembre de 2008

UN BELEN

El asnillo y el buey del nacimiento,
se pasaban las horas contemplando
al bebé, chiquitito y sonriente,
que nació a medianoche, allí en su establo.
Y, asombrados, se dicen y comentan:
-¡Este niño, es un niño un tanto extraño,
acaso sea un rey o alguién divino;
desde que en el pesebre fue acostado,
una paz honda y un aire alegre
están por el establo revolando!

Y en esto que, humilditos, sigilosos,
junto al asno y al buey afortunados,
todos los animales del belén
dejaron su lugar y se acercaron.
Y en voz tenue -no se despierte el Niño-,
cabe el pesebre apretados,
con mucha devoción y sin remilgos,
cada cual su oración fue desgranando.

Un corderillo le dijo:
- Tú eres el Cordero Santo
¡gracias por haber querido
hacerte un cordero manso,
y por hacerme tu signo!

Y una blanquita paloma,
-con un arrullo ensayado-
le cantó una nana al Niño
que hablaba de paz y abrazos.

Y una gallinita pinta
le dijo cacareando:
-¡gracias, porque en mi humildad
alimento a los humanos!

Al oir estas palabras,
dijo un bien cebado pavo:
-¡yo sí que soy delicia,
yo sí que soy un buen plato
para celebrar las fiestas
de tu nacimiento humano!

Y un cerdito, bien rechoncho,
dijo humilde y cabizbajo:
- ¡ espero, niño Jesús,
que algún día tus cristianos
me aprecien y me bendigan,
y del jamón no hagan ascos!

Y, hete aquí, que un ratoncito,
-atusándose el mostacho-
se presentó de improviso
y dijo con desparpajo:
-¡Yo también vengo a adorarte,
y a decirte, en mi descargo,
que lo que afirma esa copla
de un villancico profano,
de haber sido yo el causante
del roído descarado
del calzón de San José,
¡mentira!, ¡que quede claro!

Una vez pasaron todos
junto al pesebre rezando,
hizo su presencia el búho
con sus redondos ojazos:
- Señor, Luz de las naciones,
Sol que nace de lo alto,
esplendor de claridades,
¡gracias por haberme dado
estos ojos que perforan
cielos oscuros y opacos!
Sólo hoy, por vez primera,
llegué a sentirme ofuscado
por esa luz de los tuyos,
tan divinos y tan claros.
Y con esa autoridad
de un buho prudente y sabio,
les dijo a sus compañeros:
- ¡vamos muchachos, volvamos
a ocupar, de nuevo, el puesto
que tenemos asignado;
sigamos siendo el adorno
del belén del Niño Santo!

Y el Niño abrió sus ojitos,
y a todos los fue mirando
con una mirada tierna
que era sonrisa y abrazo.

viernes, 19 de diciembre de 2008

Noche de Navidad

... Y la noche, de pronto,
se ha vestido de luz
y hay estrellas coquetas
que han montado una gala
en su inmenso dancing-club.

Su asomrado parpadeo
son castañuelas
que les marcan un ritmo
que ¡no lo veas!

Y los ángeles lanzan
al aire sonajero
el primer villancico
que en el cielo aprendieron:
"¡Paz y amor a los hombres
que desean ser buenos!"

Y en Belén hay rumores
de besos maternales,
y divinos latidos
en niño corazón de carne,
y loca canción de estrellas
a duo con los ángeles.

Los pastores que velan en la noche
reciben las primicias del mensaje:
"Un Dios os ha nacido,
acudid a adorarle."

¡Tan sólo el humilde puede
creer pequeñez tan grande;
sólo el que vela sorprende
misterio tan inefable!

... A los pies del Niñito
y de la Virgen -madre
han dejado el obsequio
de las cosas pequeñas
que el amor hace grandes.
Y se llevan prendidas del alma
las dos grandes estrellas de sus ojos
que esa noche anticipan el alba.

viernes, 14 de noviembre de 2008

Parábola de los Talentos (Mt 25, 14)

El Reino de los cielos se parece
a un hombre que se va de viaje, lejos,
y encomienda a sus siervos, muy perplejos,
que cuiden bien su hacienda, a ver si crece.

Cinco, dos, un talento les ofrece;
los primeros negocian, sin complejos
no dejan los talentos se hagan viejos
y así, la hacienda en sus manos florece.

El que tenía tan sólo un talento
tuvo miedo en negociar con él
y lo escondió en la tierra al momento.

Cuando volvió el señor del viaje aquel,
premió a los dos primeros con contento,
y al otro quitó el talento por infiel.

lunes, 3 de noviembre de 2008

Oración a la hermana muerte

Esta oración inocente,
esta súplica, estos rezos,
quiero hacerte, muerte mía,
hasta que el día postrero
llegues, a pasos silentes,
nanas cantando a mi sueño,
mi largo sueño de muerte
amortajado en silencios.
Y esta es mi oración creyente:
Ven a mí, hermana muerte,
no cuando yo te llamare,
mas cuando a Dios agradare.
Ven a mí, hermana muerte,
no como yo te lo pida,
sino como Dios decida.
Yo acepto, Jesús, mi muerte,
y la acepto desde ahora,
como aceptaste la tuya
cuando te "llegó la hora"
que el Padre quiso ofrecerte.
Quiero correr yo esa suerte:
que mi voluntad se incluya
en un "cuando", "donde" y "como"
quiera el Padre hacer la suya.

lunes, 27 de octubre de 2008

El mandamiento principal

- ¿Cuál es, Señor, el primer mandamiento?
- ¿Qué dice vuestra Ley, qué dice y canta?
- Que Dios es único en su unidad santa
y a él sólo hay que amar sin fingimiento.

Y hay un segundo que es prolongamiento:
amarás a tu prójimo con tanta
caridad como te tienes y encanta,
con un amor de igual abundamiento.

Y esta es la respuesta del creyente
porque toda la Ley y los Profetas
en ella están de modo fehaciente.

Que en esto no hay trucos nirecetas:
si confiesas a Dios sinceramente
ya estás cerca del Reino y de sus metas.

martes, 23 de septiembre de 2008

El candil

¡Quién pudiera cantar, como mereces,
tu dilatada, santa, humilde historia,
mi candil de antiquísima memoria,
portador de una luz que siempre ofreces!

Los oscuros rincones esclareces,
y a lo que era sombra mortuoria
le pones aureola, luz de gloria,
que en ronchitas de luz siempre floreces.

La mecha, en el aceite va empapada,
un aceite evangélico y cristiano,
signo de caridad fraternizada.

¡Mi candil tenga aceite cotidiano!:
sin caridad, mi mecha está apagada
y no puedo ver el rostro al hermano.

lunes, 11 de agosto de 2008

Jesús pasa

Ibas de aldea en aldea
y, aunque siempre ibas de paso,
nadie podía decir
que tú pasases de largo.
Por más deprisa que fueras,
siempre tomabas contacto
con el pobre y el enfermo,
¡siempre allí pasaba algo!
Que por donde tú pasabas,
-aunque fuera breve el paso-
algo nuevo iba a ocurrir,
¡pues, no pasabas de largo!

Tú sigues viniendo a mí
en un encuentro diario,
y yo sé muy bien, Jesús,
¡que nunca pasas de largo!

lunes, 4 de agosto de 2008

Multiplicación de los panes y los peces

Seguían a Jesús ya hacía tres días
y estaban hambrientos, desfallecidos
- "Dadles vosotros de comer", queridos,
que aquí no hay pueblos ni panaderías.

Nos parece, Señor, que desvarías:
son miles los hambrientos reunidos
y muchos los denarios requeridos,
y sabes de nuestras economías.

-"He aquí cinco panes de cebada".
-"Pero, ¿qué es esto para tanta gente?
¡Y en manos de Jesús se hace la hornada!

Comieron hasta hartarse, alegremente.
El compartir lo tuyo y tu tajada,
eso es lo cristiano y más urgente.

sábado, 19 de julio de 2008

Trigo y Cizaña (Mt 13, 24)

Siempre el hombre fue campo
en el que el Bien y el Mal
libran dura batalla
al tiempo de sembrar.

Dios siembra su semilla
de trigo candeal,
y el Maligno, de noche, cizaña sembrará
si el criado, indolente,
se va a dormir, sin más.

Luego vendrán las prisas
de querer arrancar
la maligna cizaña,
negrura de maldad.

-"No seáis impacientes,
esperad al final,
hasta que el tiempo llegue,
el tiempo de segar."

La paciencia de Dios
espera, una vez más,
la conversión sincera;
da otra oportunidad:
que no quiere la muerte
de aquel que obra mal;
sólo quiere que viva,
que vuelva a su amistad.

No arranques tú a la fuerza
la cizaña del mal:
que sólo al mal vence el bien
y el saber perdonar.

lunes, 28 de abril de 2008

¡Aleluya!

¡Qué alegre es tu presencia,
-Señor resucitado-
cuando la fe te encuentra
porque te fue buscando!

¡La fe es la Magdalena
que te busca entre llantos!

Mi aleluya, hoy se eleva
y vuela de mis labios,
tejiendo con sus vuelos
tapiz de alegres salmos.
Tu paz y tu alegría,
-Señor resucitado-
ponen alas y ritmo
a mi fe y a mi canto.

martes, 1 de abril de 2008

Cirio Pascual

El cirio, alto, fuerte y luminoso,
signo de un Cristo ya resucitado,
signo de un Cristo vivo y exaltado
a la derecha del Padre amoroso.

La antorcha de un triunfo clamoroso
sobre la muerte y el negro pecado
-que al hombre le traía esclavizado-
tu antorcha, sí, de vencedor glorioso.

Que esa luz de tu antocha luminosa,
alumbre el maratón de esta vida
hasta cruzar la meta victoriosa.

Que esa luz, en tu cirio florecida,
alumbre al hombre a quien la sombra acosa
y vea en tu Luz la suya encendida.

lunes, 31 de marzo de 2008

Santa Teresa del Niño Jesús

Junto a la santa madre, gran Teresa,
apareces, pequeña Teresita,
como la más peqeña carmelita
que en vivir del amor pone su empresa.

Un día descubriste, sin sorpresa,
que lo que más la Iglesia necesita
son corazones que amen gratuita
y filialmente al buen Dios que nos besa.

Si Dios es Amor, por definición,
tú sabías que había que buscarle
por caminos de un niño corazón.

Como niña, supiste suplicarle
que hiciera del amor tu vocación,
pues, toda santidad está en amarle.

domingo, 30 de marzo de 2008

Soneto a la Luz

Que es divina la luz que nos alumbra,
y aureola de luz lo santo viste,
que de un manto de luz Dios se reviste
y es Luz indeficiente que deslumbra.

Y el hombre, que tan sólo ve en penumbra,
tan fuerte claridad no la resiste,
tan sólo si la fe y su luz le asiste,
tan sólo, entonces, la sueña y vislumbra.

Siempre es la luz metáfora divina
que nos trae de Dios claro mensaje
y altas trascendencias adivina.

Y es para mí, Señor, claro mensaje
cuando tu luz se posa en mi retina
y rien los colores del paisaje.

viernes, 21 de marzo de 2008

Antiserpiente (Núm 21, 6-9)

"Cuando en alto yo sea levantado,
a todos hacia mí he de atraer",
los brazos de mi cruz han de acoger
a cuantos el pecado ha emponzoñado.

¡Cordero en una cruz crucificado,
me basta alzar los ojos para ver
que tu sangre no cesa de correr
de tus manos, tus pies y tu costado!

Que si una vez, Señor, así te he visto,
sepa ser, como Pablo, consecuente;
que no quiera saber ya de otro Cristo
que de aquel que por mí, amorosamente,
quiso morir de gloria desprovisto.
¡Que siempre vea en ti mi antiserpiente!

jueves, 20 de marzo de 2008

Getsemaní (Mt 26)

Vas a Getsemaní,
-a donde tantas noches antes fuiste-
para encontrar allí
la paz que ahora perdiste,
porque el dolor oprime tu alma triste.

¡Ya está tu suerte echada!
que la rabiosa enemiga jauría
acecha agazapada;
que ya ha llegado el día
de esa tu noche oscura y agonía.

- "Padre, si es posible,
pase de mí este cáliz de amargura!"
Por más que sea horrible,
mi esperanza es segura
porque sé que me quieres con ternura.

Sudas sangre abundante,
que surcando tu cuerpo, al suelo llega
en río desbordante,
y el mundo entero riega
y en paz y bendición todo lo anega.

Sólo el propio dolor
te va en la larga noche acompañando;
todos, alrededor,
dormidos, descansando,
y en un reino triunfal aún soñando.

-"¿No pudísteis velar
y orar un poco al Padre, aquí conmigo?
¡Vamos ya, despertar,
que Judas -nuestro amigo-
llega para entregarme al enemigo!"

Y Judas se adelanta
y besa a Jesús -lo convenido-
¡beso traidor que espanta,
falso beso, escupido
en noche de traición y negro olvido!

Queda Getsemaní
envuelto en un sudario de letargo,
y a los olivos vi
llorar -silencio largo-
lagrimones de olivas -verde amargo-.

lunes, 18 de febrero de 2008

Bienaventuranzas (Mt 5)

Serás bienaventurado,
serás un hombre feliz
si tu promesa es tamiz
de un corazón despegado.
Si vives esta pobreza
de espíritu y corazón,
ten la segura certeza
que el Reino será tu don.

Serás bienaventurado
y poseerás la tierra,
si eres manso y sosegado
y nunca buscas la guerra.

Serás bienaventurado
si lloras con los que lloran,
pues tú serás consolado
con caricias que enamoran.

Serás bienaventurado
si padeces hambre y sed
por la justicia acuciado;
oirás: ¡tomad, bebed!
y por Dios serás saciado.

Serás bienaventurado
si eres misericordioso
con el pobre apaleado,
pues, Dios te será abundoso.

Serás bienaventurado
si es limpio tu corazón,
pues, si está purificado,
verás a Dios sin ficción.

Serás bienaventurado
si buscas y amas la paz,
y entonces serás llamado
"hijo de Dios", sin disfráz.

Serás bienaventurado
si, a causa de la justicia,
sufres y eres maltratado;
recibirás la primicia
del Reino por ti heredado.

domingo, 10 de febrero de 2008

Jesús Tentado (Mt 4)

Recibido el bautismo,
se rasgó, de repente, el alto cielo,
y el Espíritu mismo
-como paloma en vuelo-
se posó sobre tí, limio y sin velo.

Y ese Espíritu Santo
es quien, ahora, te empuja al desierto
a luchar, entre tanto,
a rostro descubierto,
contra el gran tentador, el Diablo experto.

Y en el desierto arcano,
-la soledad tan sólo por testigo-
a solas, mano a mano,
citas al enemigo
y le infliges durísimo castigo.

Que hasta Satán se entere
que no es tu mesianismo triunfalista;
que tu misión prefiere
el servicio altruista,
porque servir al hombre es tu conquista.

Reino que se construye
en humilde servicio y en pobreza;
la soberbia rehuye,
y funda su belleza
en esa pequeñez que es tu grandeza.

El pulso terminado
y en singular combate concluído,
un ejército alado
del cielo descendido,
le sirve a su Señor, nunca vencido.

sábado, 9 de febrero de 2008

¿Para qué sirve la sed?

"Bueno es saber que os vasos
nos sirven para beber;
lo malo es que no sabemos
para qué sirve la sed."
Antonio Machado (Provervos y Cantares, XLI)


Yo respondo a esa ignorancia
porque yo me sé un porqué:
porque el hombre es un deseo
y el deseo es una sed.

Que ¿para qué sirve, pues?
Pues sirve, señor poeta,
-y eso lo sabe Vd. bien-
para volver a beber;
para volver a sentir,
una y otra vez,
un deseo satisfecho,
aunque vuelva a renacer.

Tú mismo en otro cantar,
con diferentes palabras,
viniste a decir igual:
"la verdad es la esperanza".

La vida es puro deseo,
aunque sin saber de qué;
es ansia de caminante
que necesita beber
en todos los manantiales
con fruición y avidez.
Porque el hombre es peregrino
que nunca apaga su sed;
su deseo es insaciable,
porque una vez satisfecho,
siempre llega otro después;
y hasta que llegue al final
arden de fiebre sus pies.
Y esto, en lenguaje cristiano
lo decimos de una vez:
Esperanza teologal.

Para que la vida sea
una vida de verdad,
tiene que ser un proyecto,
un lanzarse a caminar
hacia horizontes abiertos,
hacia una meta final
donde ya no haya horizontes
que inciten a ir más allá.
Quedaremos sin deseos
sólo al fin del caminar,
cuando bebamos a tragos
las aguas de la Verdad
que sacian por fin la sed
en divino manantial.

Y aún mantengo mis sospechas
si al beber de esa Verdad
en las fuentes de la Vida,
no se aumenten siempre más
los deseos de beber,
que es poco una eternidad
para saciarse de Dios;
y la gloria puede estar
en eterno tener sed
de un Dios que a tragos se da.
Una sed sin ansiedad
porque es una plenitud
que, al llenarse crece más.
Por eso cambio tu verso:
La Esperanza es la verdad.

Claro que en la eternidad
no hay ni un "antes", ni un "después"
pero pienso que en la gloria
es eterno tener sed
de querer ser como Dios,
como el Padre que nos ama
y nos quiere ver crecer
hacia una gloria mayor...
irnos pareciendo a Él.

(1 Jn 3/2)

jueves, 31 de enero de 2008

El principio Esperanza

El hombre es animal que siempre espera,
su principio, su "arjé", es la esperanza,
la que le abre al futuro en lontananza,
la que sirve a su acción de lanzadera.

Con este material y esta madera,
construye la barquilla en la que avanza
buscando mares de mayor bonanza,
¡y siempre la esperanza por bandera!

El creyente sí sabe su futuro,
Dios mismo es su horizonte y panorama;
y, aunque a veces, lo vea un tanto oscuro,
el canto a la esperanza es su programa;
cuando el tiempo de espera esté maduro,
tan sólo cambiará de pentagrama.

domingo, 27 de enero de 2008

Dejándolo todo le siguieron

Ibas de aldea en aldea,
y aunque siempre ibas de paso,
nadie podía decir
que tú pasases de largo.

Por más deprisa que fueras,
siempre tomabas contacto
con el pobre y el enfermo,
¡siempre allí pasaba algo!

Que por donde tú pasabas,
-aunque fuera breve el paso-
algo nuevo iba a ocurrir,
¡pues no pasabas de largo!

Tú sigues viniendo a mí
en un encunetro diario,
y yo sé muy bien, Jesús,
¡que nunca pasas de largo!