domingo, 21 de octubre de 2007

Domund

Domund, la gran jornada misionera,
domingo de una fe que se da cita
y en la calle se manifiesta y grita
en jornada infantil y callejera.

Una fe que se ofrece sin frontera,
una fe que el creyente la acredita
como la más cristiana y más bendita,
la que Cristo mandó que se ofreciera.

"Llevad el Evangelio al mundo entero,
predicad cuanto os he enseñado",
pues ya todo cristiano es misionero.

Y sabed que yo a todos he hermanado,
que mi evangelio es el pan verdadero
que para que lo deis os lo he entregado.

lunes, 15 de octubre de 2007

Teresa de Jesús

Teresa de Jesús, enamorada,
que al amor de Jesús lo entregas todo
porque eres "de Jesús" -ése es tu apodo-
y te entregas a El cual desposada.

Que todo lo demás solo es nonada,
que el amor a Jesús tiene su modo,
que es vivir su amistad, codo con codo,
en coloquial decir, no de letrada.

Rica feminidad, dulce firmeza,
frente a un machismo zafio y altanero;
un misticismo en femenil lindeza,
un morirte de amor "porque no muero",
y un saber que ese Dios de la Belleza
te habla de amistad junto al puchero.

viernes, 12 de octubre de 2007

Virgen del Pilar

Virgen del Pilar, esbeltez y firmeza,
alto signo de verticalidades,
columna enhiesta de fidelidades,
pedestal que realza tu grandeza.

Chiquita, humilde y plena de belleza,
por encima de humanas veleidades,
muestras en el alto tus maternidades
en el Hijo que es faro y es certeza.

Columna proyectad al alto cielo,
grito de fe nimbado de esperanza,
-paloma que en Jesús posa su vuelo-
marmóreo eje cósmico que alcanza
la Patria de la paz, último anhelo,
la Matria del amor, seno y bonanza.

jueves, 4 de octubre de 2007

San Francisco de Asís

Poverello de Asís, Francisco Santo,
modelo de humildad y de grandeza,
casto esposo de la dama pobreza
a la que, siempre fiel, amaste tanto.

Tu vida fue poema y puro canto,
himno de amor a la Naturaleza,
verde metáfora de Dios belleza,
reflejo de su luz y de su encanto.

Todo era para ti filial, fraterno,
y era hermana luna, el sol, la estrella,
y hasta el lobo feroz era algo tierno.

Captabas la presencia, siempre bella,
de ese Dios encarnado y Dios materno
de quien hiciste ecológica huella.